Cuando faltan 10 días para que cumpla 31 años en este planeta, creo estar en posición de dar una sugerencia absurda a quién quiera hacerme un regalo ese día. Algo que quiero, algo que me hace falta, algo que me haría sonreir cada mañana, cuando debo enfrentarme a viejas estorbosas y ahuevonados somnolientos que me impiden el paso fluído a través de vagones y pasillos del metro, para tratar de llegar en una pieza a mi trabajo. Cómo me haría feliz... sueño, alucino, me desvelo por una bocina de camión!
Obviamente, estoy hueveando... aunque ni tanto...
4 comentarios:
excelente regalo, yo quiero un vagón de metro vacío para poder leer. NO MAS MANOSEOS GRATIS!!!
Nada más el gusto de ver a tanto pavo espantado por tal sonido ya me daría ganas de tenerla xD
Es que hay tanto pavo en el Metro...
jajajaja
Veo, mi estimado, que adaptó el método propagandístico precumpleañero.
Amé su sugerencia de regalo. Es algo que empezaré a promover entre mis conocidos a ver si se dan por enterados para la Navidad.
Ah... sólo faltan 8 días
mmm lo tendré en cuenta
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